Empecé la sesión jugando con las sobrexposiciones
Una toma similar pero sin juegos de medición
El oleaje golpeando la peña del Caballar, en la playa de Aguilar
Con tanta espuma fui a probar suerte a la zona de las Cuchiellas
Las olas prácticamente escondían la peña de Queso
Un encuadre forzado y delimitado por las Cuchiellas y el Caballar
Rocas y espuma, al fondo Peña Seis
Jugando con reflejos, luces y movimiento
Las olas cubriendo de espuma la arena de la playa de Aguilar
El agua fluye, la roca permanece estática
Aquí el movimiento también sugiere profundidad
Como os comentaba, aquella tarde la pleamar me limitaba mucho el movimiento por la playa. Aun así intenté buscar encuadres diferentes y llamativos. Así que después de un rato en la escalera principal, me fui hasta otro de los accesos. No pude bajar a la arena, pero la barandilla me dio bastante juego. Una por otra.
Escalinata hacia el abismo espumoso
Cuando lo cotidiano o lo insulso se convierte en llamativo
Una toma casi a pie de playa, creo que sigo notando la humedad
La llegada de la noche propició exposiciones más largas
Con esta última imagen, me despedí de la playa y finalicé la sesión
Como habéis visto, la playa de Aguilar, sigue siendo muy atractiva para la fotografía. A pesar de las muchas horas que pasé allí tomando imágenes, no me aburre. Está claro que, mientras pueda, seguiré paseando por su arena buscando encuadres, fotos llamativas o simplemente inspiración.
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