Una visión particular del anfiteatro de Cudillero
Como viene siendo habitual, no buscaba la postal típica
Lo interesante era buscar nuevas perspectivas
Y dar con encuadres que llamasen la atención
Callejeando por la villa pixueta, fueron pasando las horas
Cuando me quise dar cuenta, estaba inmerso en la oscura noche
A partir de ese momento aproveché para jugar con las luces
De inmediato, las farolas se convirtieron en soles
El anfiteatro se mostraba luminoso a pesar de la oscuridad
Hasta saltaban las chispas como si fueran fuegos de artificio
Tras la observación desde los miradores, regresé a los callejones
Las escaleras giraban como espirales
Y hasta la plaza de la Marina parecía vestirse de luces para la ocasión
Una visión amplia, nocturna y a pie de mar del anfiteatro de Cudillero
Esta toma fue una de las que más me gustó de toda la sesión
Una última foto de la zona más próxima al puerto antes de marchar
Tras varias horas en Cudillero, regresé a San Esteban
Allí la noche era igual de cerrada pero la niebla aportaba un punto de emoción
Seguí buscando encuadres distintos, más complicados si cabe
Los barcos se preparaban para la pesca de angula
Pero ya era demasiado tarde, así que di por finalizada la jornada
Y para cerrar, una toma creativa, una de mis favoritas del día
Pues lo dicho, que a pesar de que la noche y el atardecer fueron un poco insípidos, la tarde fue provechosa. Al menos eso es lo que humildemente creo. No se que os parecerá a vosotros. En breves, más y mejor.
Francamente genial,muy interesante.
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